martes, 30 de marzo de 2021

WARHAMMER FANTASY: Legiones No Muertas, conversión Nagash

 Continúo el lento pero seguro avance de mi Lagión No Muerta para la cual usaré el libro de ejército de Nagash de El Fin de los Tiempos.


Pero claro... necesitaba un Nagash y me encontré con un problema: la miniatura antigua, por mucho que tenga ese espíritu viejuno y entrañable, era horrible...


... y la nueva, pese a que tiene muchos defensores y no se puede negar que sea un figurón, tampoco me gusta. No por la figura en sí, sino por el tamaño y la manía de tener que jugar con gigantes.

A ver. Tener una ingente cantidad de poder no tiene que implicar que midas 6 metros.

Siempre me imaginé a los liches poderosos como sombras de lo que fueron, carcasas sostenidas por poderes mágicos inimaginables, casi divinos y un total desprecio al mundo material con lo que, el tener un cuerpo de determinado tamaño no es importante. ¿Para qué medir 6 metros y tener largas piernas si total con sólo pensarlo puedes volar?. Con esto y la imagen de miliche favorito en mente (Azererak de Dungeons & Dragons) le di vueltas a la viejunísima miniatura que tengo de nigromante/liche en trono

Foto mala sin luz, pero es lo que hay. No lo voy a repintar porque debe ser la 2ª miniatura que pinté en mi vida allá por los... por los... dejémoslo ahí.

Pero claro, el nuevo Nagash tiene una peana enorme (100x150cms) y mide la friolera de 22 cms más o menos... ¿Cómo implementar una figura de 28mm por mucho que esté en un trono con base de 40x40 mm en esa pedazo de superficie sin que quede ridícula... pensemos.

Nagash está en su trono, aburrido, decide acabar con todo y ya. Con un leve pensamiento un vórtice de energía fantasmal se crea bajo él y, arrancando piedra y madera, eleva al nigromante y su trono. Flotando con una energía nunca antes vista a su alrededor, los 9 libros empiezan a materializarse girando sin cesar, a su paso, y sin ningún tipo de esfuerzo por su parte, los muertos se levantan y rodean la base del remolino para acabar con la vida a pie de suelo mientras Nagash, desde las alturas, aniquila sin compasión. Sólo el mejor de los capeones levantados es elegido para blandir a Zefet-nebtar, la Espada Mortis y proteger el vórtice mágico...

Con esta idea hice una peana escénica usando el remolino del Vórtice de Perdición que tenía por ahí olvidado en su caja y los esqueletos de los Guardianes del Sepulcro de Nightvault haciendo de los muertos que se levantan al paso de Nagash. El esqueleto con mandoble será el que pinte como portador de la Espada Mortis y representará a Nagash volando por el campo de batalla repartiendo terror y no-vida por igual.

Cosas pendientes: el suelo del trono, intentaré ponerle piedras flotando alrededor para repesentar que fue arrancado y así disimular la unión. Los 8 libros de Nagash que saldrán de las calaveras de la base y flotarán a su alrededor (el 9º está en el atril) que no sé cómo hacerlos BUAAAA...

Intentaré pintar el vórtice de verde fantasmal iluminando las espaldas de los esqueletos que lo rodean, modelaré de alguna forma 8 libros y "tentáculos" de energía que los sujeten desde las calaveras hasta, más o menos, la altura de Nagash. El esqueleto del centro frontal irá pintado con más detalle y la espada intentaré pintarla acorde a su poder.

Iré actualizando.


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